Mientras
Nena se dirige de la Isla a la Colonia, habla con Sabrina dejando impreso este
mensaje en su mente: Sabrina, es necesario que te dirijas a lo que fue el Reino
de Siam, y desde allí investigues qué es exactamente lo que sucede en Asia… tú
como Embajadora Mundial de la Paz lo has hecho muy bien, te felicito. Pero es
necesario que te hagas acompañar por varios reilones y escoltas: esta gente
parece ser agresiva, localiza a una persona que le dicen “el elemento” y que
inventó un Magma sintético, para suplantar el nuestro… Mándame un informe corto
y preciso por esta vía telepática: te quiere, tu Madre: Nena… P.D. Te doy el
poder de crear tinieblas a tu alrededor cuando es de día y luz enceguecedora
cuando es de noche… para que te defiendas… en caso de que sea necesario…
Sabrina
estaba en París, toma un Avión para cumplir su misión y lo único que averigua y
le comunica a Nena es que lo de la esterilidad es en buena parte del continente
amarillo, por no decir todo y que al fracasar el Secuestro ideado por el
Elemento, éste fue ejecutado e incinerado… como para que no quedara recuerdo de
él… de resto la gente tiene sus costumbres ancestrales en sincretismo con el
culto a Inmensidad: Vas a tener que hacer una gira por la zona para
consolarlos… y orientarlos…
Sabrina
continúa: Esta última generación de asiáticos va a ir envejeciendo sola… Nena
le dice: Quien puede darles un mejor consuelo que yo, es Inmensidad, recuerda
que nunca sabrás qué fue fantasía y qué fue realidad… Llévalos al Estado
Intermedio… abre una puerta para que se eleven… Creo que tengo un plan para
aliviar sus penas… Hay una receta de Magma “en desuso” que no los va a curar
pero que los puede ayudar “más que una gira de mi persona”, tráeme muestras del
Magma sintético a ver qué trataron de hacer y muestras de Magma natural y
fresco, o sea: “semen congelado” a ver qué podemos hacer en nuestros
laboratorios de la Colonia Nena.
Es
necesario que te reúnas con los Reyes de la zona, para que te ayuden mientras
estás allá (todo en privado) y para que nos asesoremos mutuamente en el
paliativo que estoy ideando… no me gusta nada ese sincretismo… Me despido… y si
te vienes acompañada del científico que ayudó al elemento, mucho mejor… busca
al Dr. Lee ¿Cómo sabes su nombre? Dice Sabrina: Porque lo sé… no soy adivina
pero lo sé… sé todo lo que necesito saber… Sabrina se ríe: Madre, te las sabes
todas: Las dos dicen al unísono: “Nunca sabrás qué fue fantasía y qué fue realidad”…